En 1989 se destruyó una bardota (“muro de Berlín”) denominada Muro de Protección Antifascista, edificado por la República Democrática Alemana (no capitalista), que dividía a ésta de la República Federal Alemania (capitalista). La histeria que causó en los capitalistas y sus modernos pregoneros fue de triunfo porque al fin “había ganado la democracia”. En 1991 se arriaron banderas para declarar oficialmente la extinción de la URSS. De nuevo la histeria de los capitalistas exultó triunfalismo porque ahora sí, ¡qué duda cabía!, “la democracia ganaba la contienda” y terminaba la así llamada “guerra fría”. Esos momentos son emblemáticos de lo que ha dado en llamarse “el derrumbe del campo socialista”.
He oído y leído que gente que se dice de izquierda expresa convencida que ese “derrumbe” permitió “la entrada a la democracia” de esos países. No puedo aducir ignorancia de parte de ellos porque son gente que, al menos el Manifiesto o, tal vez, El Capital, han leído como para tener un mínimo de elementos suficientes con los cuales analizar esos sucesos y obtener, por tanto, una conclusión al respecto.
Que los capitalistas y sus sicarios ideológicos hablen de “democracia”, asociando esta idea con la entrada del capitalismo en los países que no estaban dentro de él, resulta algo lógico de esperarse. Que gente que dice ser de izquierda hable de “la entrada de la democracia” en esos países cuando se impuso ahí el capitalismo, tal vez debiera llamarnos la atención sobre qué entendemos de qué y cómo lo entendemos, esto es, si cada quien puede decirse “soy esto o aquello” haciendo caso omiso que tenga o no fundamento su afirmación y si, por tanto, en el mismo sentido cada quien puede hacer sus propios conceptos, para entender lo que le venga en gana sobre sucesos como los mencionados, que ocurren en el mundo.
El “muro de Berlín” existió del 13 de agosto de 1961 al 9 de noviembre de 1989, o sea, poco más de 28 años, tiempo durante el cual -en los cálculos más aventurados- se estiman 270 muertos en el intento de superar su límite. Considerando el total de la extensión, esa barda abarcó entre 120 y un total de 160 km. En 1989 el muro estaba formado por: 41,91 km de muro de una altura de 3,60 m; 58,95 km de muro prefabricado de una altura de 3,40 m; 68,42 km de alambre de espino con una altura de 2,90 m; 161 km de calles iluminadas; 113,85 km de vallas; 186 torres de vigilancia; y 31 puestos de control (datos de wikipedia, en: http://es.wikipedia.org/wiki/Muro_de_Berl%C3%ADn). Además, “De la frontera de 156,4 km de Berlín Oeste, 43,7 km colindaban con Berlín Este y 112,7 km con Bezirk Potsdam. 64 km del recorrido estaban en áreas edificadas, 32 km en zonas boscosas, 37,95 en descampados y 37,95 km en ríos y lagos.” (Ibídem).
Sin embargo, el muro fronterizo construido por Estados Unidos en los límites de Tijuana (México) y San Diego (Estados Unidos), inició su edificación en 1994. “El muro incluye tres bardas de contención, iluminación de muy alta intensidad, detectores de movimiento, sensores electrónicos y equipos con visión nocturna conectados a la policía fronteriza estadounidense (Border Patrol), así como vigilancia permanente con camionetas todo-terreno y helicópteros artillados. Otros tramos de muro existen en los estados de Arizona, Nuevo México y Texas” (wikipedia, en: http://es.wikipedia.org/wiki/Muro_fronterizo_Estados_Unidos%E2%80%93M%C3%A9xico) Además, “Desde 1994, cuando empezó la construcción del muro, los inmigrantes ilegales han intentado cruzar por zonas más peligrosas, como por ejemplo el desierto de Arizona, lo cual ha resultado en más de 3,000 muertes desde el inicio de su operación.” (Ibidem) Esto es, con 11 años menos de existencia que el “muro de Berlín”, han muerto 11 veces más personas por la existencia del muro fronterizo edificado por los Estados Unidos. Y conste, son “democracias” a la que suele asociarse el capitalismo de las que estamos hablando.
Para reforzar la mencionada “democracia”, existe desde diciembre de 2005 el acuerdo en el Senado de Estados Unidos para ampliar la extensión del muro al total de los 1,125 km que abarca la frontera entre ese país y México. En 2006, los acuerdos correspondientes en el Senado y la Cámara de Diputados de Estados Unidos confirmaron lo anterior, produciendo la resolución 6061, Secure Fende Act of 2006 (datos de Ibid).
La “democracia” capitalista es así, la imposición de los intereses de los dueños de ese régimen contra todo y contra todos. “Confundirnos” en esto, creyéndose de las histerias o las demostraciones de triunfalismo de aquéllos, es no querer ver la horca y cuchillo de que están provistos los capitalistas para imponer su control y dominio. Por muy de izquierda que nos digamos ser, hay que fijarnos bien, abrir los ojos de las entendederas para no terminar como loros amaestrados, repitiendo las falsedades que por todos lados, como cosas naturales de la vida, buscan imponernos, de manera sutil o descara. Por eso de común se dice que del dicho al hecho existe largo trecho.
Y esto es apenas el inicio, por no dejar de caminar con la mirada atenta a lo que implica el Hombre mismo.
He oído y leído que gente que se dice de izquierda expresa convencida que ese “derrumbe” permitió “la entrada a la democracia” de esos países. No puedo aducir ignorancia de parte de ellos porque son gente que, al menos el Manifiesto o, tal vez, El Capital, han leído como para tener un mínimo de elementos suficientes con los cuales analizar esos sucesos y obtener, por tanto, una conclusión al respecto.
Que los capitalistas y sus sicarios ideológicos hablen de “democracia”, asociando esta idea con la entrada del capitalismo en los países que no estaban dentro de él, resulta algo lógico de esperarse. Que gente que dice ser de izquierda hable de “la entrada de la democracia” en esos países cuando se impuso ahí el capitalismo, tal vez debiera llamarnos la atención sobre qué entendemos de qué y cómo lo entendemos, esto es, si cada quien puede decirse “soy esto o aquello” haciendo caso omiso que tenga o no fundamento su afirmación y si, por tanto, en el mismo sentido cada quien puede hacer sus propios conceptos, para entender lo que le venga en gana sobre sucesos como los mencionados, que ocurren en el mundo.
El “muro de Berlín” existió del 13 de agosto de 1961 al 9 de noviembre de 1989, o sea, poco más de 28 años, tiempo durante el cual -en los cálculos más aventurados- se estiman 270 muertos en el intento de superar su límite. Considerando el total de la extensión, esa barda abarcó entre 120 y un total de 160 km. En 1989 el muro estaba formado por: 41,91 km de muro de una altura de 3,60 m; 58,95 km de muro prefabricado de una altura de 3,40 m; 68,42 km de alambre de espino con una altura de 2,90 m; 161 km de calles iluminadas; 113,85 km de vallas; 186 torres de vigilancia; y 31 puestos de control (datos de wikipedia, en: http://es.wikipedia.org/wiki/Muro_de_Berl%C3%ADn). Además, “De la frontera de 156,4 km de Berlín Oeste, 43,7 km colindaban con Berlín Este y 112,7 km con Bezirk Potsdam. 64 km del recorrido estaban en áreas edificadas, 32 km en zonas boscosas, 37,95 en descampados y 37,95 km en ríos y lagos.” (Ibídem).
Sin embargo, el muro fronterizo construido por Estados Unidos en los límites de Tijuana (México) y San Diego (Estados Unidos), inició su edificación en 1994. “El muro incluye tres bardas de contención, iluminación de muy alta intensidad, detectores de movimiento, sensores electrónicos y equipos con visión nocturna conectados a la policía fronteriza estadounidense (Border Patrol), así como vigilancia permanente con camionetas todo-terreno y helicópteros artillados. Otros tramos de muro existen en los estados de Arizona, Nuevo México y Texas” (wikipedia, en: http://es.wikipedia.org/wiki/Muro_fronterizo_Estados_Unidos%E2%80%93M%C3%A9xico) Además, “Desde 1994, cuando empezó la construcción del muro, los inmigrantes ilegales han intentado cruzar por zonas más peligrosas, como por ejemplo el desierto de Arizona, lo cual ha resultado en más de 3,000 muertes desde el inicio de su operación.” (Ibidem) Esto es, con 11 años menos de existencia que el “muro de Berlín”, han muerto 11 veces más personas por la existencia del muro fronterizo edificado por los Estados Unidos. Y conste, son “democracias” a la que suele asociarse el capitalismo de las que estamos hablando.
Para reforzar la mencionada “democracia”, existe desde diciembre de 2005 el acuerdo en el Senado de Estados Unidos para ampliar la extensión del muro al total de los 1,125 km que abarca la frontera entre ese país y México. En 2006, los acuerdos correspondientes en el Senado y la Cámara de Diputados de Estados Unidos confirmaron lo anterior, produciendo la resolución 6061, Secure Fende Act of 2006 (datos de Ibid).
La “democracia” capitalista es así, la imposición de los intereses de los dueños de ese régimen contra todo y contra todos. “Confundirnos” en esto, creyéndose de las histerias o las demostraciones de triunfalismo de aquéllos, es no querer ver la horca y cuchillo de que están provistos los capitalistas para imponer su control y dominio. Por muy de izquierda que nos digamos ser, hay que fijarnos bien, abrir los ojos de las entendederas para no terminar como loros amaestrados, repitiendo las falsedades que por todos lados, como cosas naturales de la vida, buscan imponernos, de manera sutil o descara. Por eso de común se dice que del dicho al hecho existe largo trecho.
Y esto es apenas el inicio, por no dejar de caminar con la mirada atenta a lo que implica el Hombre mismo.
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