BORRADOR DEL ARTÍCULO SOBRE LAS FARC

LAS FARC: UNA REALIDAD OBJETIVA

A raíz de la incursión de fuerzas militares de Colombia en territorio ecuatoriano el pasado primero de marzo, se han suscitado toda una serie de controversias que apuntan más que una supuesta ofensiva contra la delincuencia-según la versión colombiana- a una la crónica de una intervención norteamericana anunciada.

La actitud y sobretodo la posición pro estadounidenses que el presidente Álvaro Uribe con respecto a su demás pares; lo han caracterizado como el más fiel secuaz del Imperio, prueba de ello han sido los pactos acordados entre EUA y la nación colombiana contra el terrorismo y el narcotráfico, que muestran una sumisión total y sin repele a los intereses yanquis. Es en este punto donde la doble moral que caracteriza a la sociedad actual nos da el espacio para cuestionar de forma cándida: ¿Como es que el gobierno de George W. Bush pretende atacar el narcotráfico teniendo entre sus aliados latinoamericanos a un personaje no solo vinculado sino hasta apreciado por los narcotraficantes?, como lo es en este caso Álvaro Uribe personaje estimado por los Carteles de Cali y Medellín. Y no solamente al actual presidente de Colombia se le relaciona con tales organizaciones “delictivas”, sino también un gran conjunto de políticos que al llegar a tales nichos de poder no solamente han beneficiado sino también a fomentado e hipócritamente solapado al narcotráfico. Es pues necesario desmitificar a la supuesta lucha a muerte que preconiza tanto la Casa Blanca como los gobiernos que se alinean a los intereses norteamericanos. El narcotráfico en el Sistema Capitalista, al igual que el tráfico de mujeres, redes de prostitución y pornografía, trabajo infantil y demás irracionalidades de la condición humana, no significan ningún peligro para su reproducción como modo de producción, al contrario éste tipo de actividades representa un aliciente a la acumulación, son actividades que reaniman al sistema y que lo impulsan a seguir apropiándose de la plusvalía social, por eso es prácticamente imposible que el Estado intente erradicarlos o en su defecto los ataques a dichas actividades son de forma superficial y sólo para mantener tranquila a la sociedad. Y más bien es pretexto para generar una cortina de humo que tiene como fin abrumar el clima social para que se permita la criminalización del pueblo como es en el caso mexicano donde con pretexto del narco se han llevado acabo toda una serie de transformaciones a la constitución como fue la reciente modificación del articulo 16 que desamaran totalmente a las sociedad mexicana ante las instituciones judiciales. Aunado a esto el despliegue mediático y físico del ejército en las calles no es para acabar con los actos delictivos sino que es un claro mensaje de represión contra aquel que ose en cambiar el contexto actual. En el caso del conflicto diplomático Colombia -Ecuador, lo que se disfraza es el interés que tiene EUA para intervenir y sobre todo vigilar a Venezuela y Bolivia, naciones que recientemente se han caracterizado por su aguerrida defensa de su soberanía nacional y sobre todo por su afrenta a las arbitrariedades y pretensiones de Estados Unidos. Tales hechos violentos son más bien dados estas circunstancias, el pretexto infalible para la localización de una base norteamericana en territorio latinoamericano. Y por supuesto Álvaro Uribe y la oligarquía colombiana brillan por su esplendida contribución criminalizando a la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, adjudicándoles supuestos nexos con el narco (no se abran mordido la lengua) y pretendidos actos terroristas. Antes de cuestionarnos si las FARC son o no merecedores de tales motes es pues necesario preguntarse realmente ¿Cuál es el origen de la guerrilla? Así pues este tipo de movimientos armados son la respuesta violenta a las condiciones de miseria y sujeción a las que la clase dominante sumerge a las clases subyugadas, esto es a la clase obrera, de tal suerte que las FARC- la guerrilla más antigua de Latinoamérica todavía en funciones-surge como la necesidad del pueblo colombiano de luchar y confrontar a las condiciones inhumanas en que estaban y siguen viviendo. Sus acciones han sido empañadas por los discursos envilecidos de dichos peones y han generado propaganda falaz donde se les rechaza mediaticamente por sus acciones como los secuestros de políticos, diplomáticos y turistas; se les acusa de asesinos y violentos, argumentos totalmente falsos e inconsistentes ya que las personas liberadas han expresado una franca admiración y sorpresa ante los tratos recibidos por los guerrilleros durante su estancia en los campamentos. Pero nuevamente la doble moral se hace presente ¿Cómo es posible que la sociedad colombiana-en su mayoría- le recrimine a las FARC sus acciones si por ejemplo cuando Coca Cola mando a matar a lideres sindicales no se hizo ninguna acción?, ¿Acaso la vida de un político vale más que la de un trabajador?, ¿No es más bien Coca Cola una transnacional terrorista de la clase obrera? Es pues preocupante como la oligarquía colombiana y sus cabecillas políticos se funden junto con EUA para culminar sus intereses económicos a costa de la sociedad colombiana. Y de paso encuentra una diplomacia tibia como lo es la de la Organización de los Estados Americanos (OEA)que solo le da un pequeño jalón de orejas al “travieso” estado colombiano en lugar de condenar y enjuiciar al presidente y personas que hayan intervenido en dicha decisión. Ni hablar del cómplice silencio del pelele y su diplomacia, que en vez de expresar una postura se muestra indeciso entre a cual de las dos naciones mostrar su apoyo- así que le juega al medio centra-y sobre todo la inexistencia del apoyo a los jóvenes murtos en los bombardeos y a la UNAM; claro no es de exornarse su negativa de una férrea defensa, es preocupante como la lucha de los compañeros universitarios se ha visto linchada y cuestionada por los medios de comunicación, al grado que en periódicos como lo es Crónica, un columnista se mofa del poco entendimiento que los alumnos de la Facultad de Filosofía y Letras exteriorizaron en conferencias de liderazgo empresarial que dicho columnista impartió, caracterizándolos por su desubicada experiencia como faltos de inteligencia y flojos. ¿Cómo es posible que existan tan pobres debates del pape de la UNAM? Además que es lo que se esperaba que hiciéramos los jóvenes ante un escenario desalentador, donde se elitizan los medios para cubrir las necesidades, hay miseria, desempleo , violencia, privatizaciones a diestra y siniestra, represión, en muchos casos ni siquiera podemos aspirar a terminar nuestra educación; salarios bajos, corrupción, desolación; que se pretende si a la mayoría de la sociedad y sobre todo a los jóvenes se les niega una vida digna en pro del mantenimiento y reproducción de los interese de una clase. Es pues difícil el camino que nos espera como jóvenes y universitarios pero mediante la conciencia y la organización se pueden cambiar el triste futuro de nosotros y de la sociedad que nos necesita y a la que pertenecemos.

Cualquier comentario sera bienvenido antes de que se publique, así que apúrense. Saludos Terrícolas.

Y al Kokis una mentada de madre por que no me dijo nada de mi articulo, ya no eres mi ídolo y la doctora Guayabita ya te despidio del Ceiten por no pelarme a mi y a mi articulo.